Cómo hacer tu propio libro

Опубликовал Admin
Hacer un libro propio es un sueño común de muchas personas con diferentes tipos de vida. No importa si eres un autor exitoso o un nuevo padre que quiere algo original que leerle a su hijo, armar un libro, incluso uno pequeño, requiere de mucho tiempo, habilidad y visión. Sin embargo, el resultado es algo que tú (¡y con suerte muchas otras personas!) atesorarán por muchos años.

Planear tu libro

  1. Comienza con cierta idea de lo que quieres hacer. La palabra "libro" es imprecisa y se podría tomar de diferentes maneras. ¿Buscas escribir una novela? ¿Un cómic? ¿Un libro ilustrado para niños o adultos, incluso? ¿Un manifiesto sobre el nihilismo? Si quieres hacer un libro, lo más probable es que ya tengas cierta idea de lo que quieres hacer.
    • Por lo general, los libros se dividen fácilmente en dos categorías: ficción y no ficción. Sin embargo, existen muchos medios posibles con los que puedes abordar a cualquiera de estas categorías. Algunos libros son muy visuales, mientras que otros solo se valen de las palabras escritas.
  2. Lee otros libros. Asimilar el arte de otras personas es un paso integral (y con frecuencia subestimado) para crear un libro. Si te has decidido por un medio o un género, debes optar por algunos libros que creas que representan las mejores características de ese estilo. Fíjate no solo en el contenido superficial del trabajo del escritor (como el argumento y el personaje), sino en las maneras en las que lo produce, ya sea por medio de figuras retóricas, metáforas o escenas retrospectivas.
    • Por ejemplo, alguien que escribe acerca de un área existencial podría considerar a George Batailles o Albert Camus. De igual forma, un supuesto escritor de fantasía podría querer leer las series de Elric, del escritor Michael Moorcock.
    • Si te gusta un truco que utiliza un autor en cierto trabajo, apúntalo. Los escritores grandiosos siempre toman prestados algunas técnicas entre sí. Sin embargo, el plagio solo ocurre cuando una información específica se copia sin dar crédito a su autor.
  3. Determina tu audiencia objetivo. Ninguna pieza de arte se creó realmente en un espacio aislado. Incluso si solo tú u otra persona leerán tu libro, considerar el tipo de experiencia de lectura que será tu libro es una parte necesaria de la planificación. Si planeas enviar tu trabajo en algún momento a una editorial o a una distribuidora profesional, ten en cuenta lo que podrían buscar en las nuevas publicaciones. Si escribes una historia para tu hijo, trata de imaginar cómo sería que alguien te la lea a la hora de acostarte.
    • Hacer una investigación acerca de los segmentos y los éxitos de ventas te ayudará si tienes una actitud seria en cuanto a ingresar al gran mundo de la escritura.
  4. Trata de escribir libremente. Si sufres del caso de bloqueo de escritor, prueba con unos ejercicios de escritura libre. Deja que tu mente se descontrole con unas ideas y no te preocupes demasiado por la manera en que se vea como producto terminado. Asimismo, no hay muchos escritores que no pongan toda su confianza en los efectos beneficiosos del consumo medio de alcohol o café para hacer que la creatividad fluya.
    • Escribe utilizando una idea. Conéctate con lo que piensas y escribe lo que sea que se te venga a la mente. La mayoría de las veces, podrás trazar una secuencia coherente de ideas a partir de este acto.
  5. Reconoce la ética laboral involucrada con la creación de un libro. Antes de salir de la fase de concepción intelectual, es importante que te detengas y consideres cuán difícil puede ser hacer que uno se vuelva realidad. La mayoría de los proyectos que se comienza nunca llega a terminarse. Normalmente, esto se debe al hecho de que las preocupaciones de la vida real, como el estrés laboral o de las relaciones, se interponen en el camino. Es más, podrías perder rápidamente la inspiración si dejas el proyecto en pausa por mucho tiempo. A pesar de que la carga laboral dependerá del tipo de libro que escribes, esta actividad sigue siendo un gran compromiso. Solo inténtalo si realmente crees que podrás hacerlo.

Escribir tu libro

  1. Forma un argumento. No puedes escribir un libro sin primero tener una idea clara de lo que escribirás. No será satisfactorio leer un libro de principio a fin si está escrito insensatamente. Toma las ideas que ingeniaste mientras planificabas y dales una secuencia de modo que se vea como algo asombroso e interesante. Todo funciona, sin importar cuán ambicioso sea por naturaleza, con tal de que tenga un principio, una parte media y un final. Utiliza la inspiración de otros trabajos si te trabas.
    • Si tu libro no es de ficción, reemplaza el argumento por una tesis o una información. De muchas maneras, formar un libro de ficción y uno que no es de ficción es muy similar. Se trata de un proceso que consiste en reunir tus ideas de una manera que te dé cierta impresión de lo que escribirás cuando tengas que escribir el acto.
  2. Escribe un esquema. Un esquema básico abarcará el principio, la parte media y el final que ingeniaste durante la creación del argumento, lo que le dará más sentido y estructura. En este punto, debes poner todas tus mejores ideas en el papel. No puedes asegurar que no las olvidarás si no las escribes. No te preocupes si el esquema no tiene sentido para nadie más que para ti. Sobre todo, no realices superficialmente el proceso de esquematización. Es posible que no sea tan glamoroso como escribir, pero te ahorrará la frustración en el futuro. Un plan consistente genera una ejecución consistente.
    • Colócale personajes o ideas al esquema. Al contar con algunos puntos básicos, podrás considerar ahondar en algunos de estos. La ficción se vale mucho de los personajes, así que puede ser útil hacer unos esquemas separados para cada personaje y cómo evolucionan a lo largo de la historia.
  3. Perfila los capítulos del libro. Cuando te ocupas de algo tan potencialmente intimidante como todo un libro, una manera inteligente de hacer que el proceso se sienta más manejable es dividirlo en partes. Si ya tienes un esquema de los eventos o las ideas que te gustaría cubrir en el libro, se vuelve más simple dividirlo en las partes más digeribles que creas que serán más útiles para ti y para el lector. Si tienes dificultades para decidir qué contendrá cada capítulo, debes retomar el marco y añadirle nuevos detalles.
    • Trata de asignarle un título a cada capítulo y algunas líneas que detallen lo que hay dentro de este. No tienes que utilizar los nombres de los capítulos en el producto final, sino que estos deben darte una pauta acerca de dónde deben ir cuando escribas lo que será definitivo.
  4. Escribe un documento preliminar. Para esta etapa, ya debes contar con un esquema bien realizado y que deje poco espacio de cuestionamiento en cuanto a la dirección de tu libro. Al fin has logrado darle algo de peso a tus ideas. Sin embargo, tu primer intento para hacer una redacción debe considerarse como otro esquema. Trata de escribir tan libremente como puedas; no te censures. Toma cada capítulo independientemente y escribe hasta que sientas que has cubierto los puntos con suficiente profundidad. No debes preocuparte si el libro se ve un poco corto en este punto. Muchas de estas ideas se expandirán o cambiarían por completo en el bosquejo final.
  5. Encárgate del bosquejo final. La redacción, ya sea como una profesión o un pasatiempo, es una actividad que abarca mucha planificación. Es posible que concuerdes con esto si has seguido los pasos indicados hasta ahora. En cualquier caso, es en este punto en el que debes concentrarte en escribir el producto final. Podría tomarte días, semanas o meses, pero las horas invertidas finalmente verán que tu sueño literario tomará una forma consistente. Es recomendable establecer una cantidad de tiempo al día para ocuparte de escribir. No te permitas perder el enfoque de lo que quieres hacer.
    • Un bosquejo final se considera una edición de la estructura macro, pero debes darle a la copia terminada otra serie de revisiones después de leerla por completo.
  6. Piensa en un título creativo. Algunas personas conocen el nombre de sus libros antes de escribir siquiera la primera palabra de sus escritos. En otros casos, el título podría ser lo último que ingenian. Un título realmente grandioso atraerá a un lector potencial sin que sepa nada más al respecto. Piensa en los títulos de los libros grandiosos como La rebelión de Atlas de Ayn Rand o El hobbit de Tolkien que son los que se quedaron en la mente de las personas, sin importar si realmente leyeron el libro antes. Sé paciente y trata de pensar en una manera económica y concisa de resumir tu libro en algunas palabras o menos.
    • Escoge algunas palabras del manuscrito si tienes problemas para definir el título. Es posible que ya hayas escrito el título de tu trabajo, pero no pensaste en designarlo como tal en aquel momento.

Hacer la copia física

  1. Crea una portada. El estilo preferido para una portada depende del tipo de libro que se escribe. Si tienes la intención de vender tu libro a una casa editora, la portada debe mantenerse relativamente básica. Haz una portada que ofrezca un indicio de lo que se trata en tu libro.
    • Cíñete a lo básico del título del trabajo, como el nombre, la fecha y la información de contacto, escrito en una fuente tan grande como para que se lea con facilidad a una corta distancia. Sin embargo, con un proyecto creativo, las posibilidades son infinitas. Si eres artístico visualmente, un dibujo que combine con el título le añadirá algo de estilo.
    • Un título es obviamente obligatorio para cualquier portada. No importa cuán aventurero te vuelvas con el diseño de la portada, asegúrate de hacer que tu título sea grande y osado.
  2. Crea una pasta. La mayoría de tus libros favoritos, desde los que son de fantasía hasta los clásicos encuadernados con cuero, podrían tener una pasta atractiva. Si bien es cierto que el refrán común nos indica que no juzguemos a un libro por su cubierta, no hay un libro que no haya recibido la ayuda de una imagen atractiva para lanzarse. Una pasta debe envolver ambos lados de tu libro. Si mides la pasta por tu cuenta, también considera el área del lomo del libro.
    • Para hacer un libro en casa, debes laminar un papel de tu preferencia. Dibuja una cubierta atractiva en la pasta si tienes el gusto artístico para hacerlo y no olvides incluir los detalles importantes, como tu nombre y el título del libro.
    • Ten en cuenta que las pastas solo son realmente dignas de consideración si haces un proyecto completamente por ti mismo y no tratas de enviárselo a una casa editora. Si tu libro se publica profesionalmente, la editorial se encargará de la pasta y los trabajos artísticos.
  3. Dale formato al manuscrito. Las editoriales se topan con muchas propuestas al día. Si bien es cierto que algunas editoriales podrían no tener una serie de requerimientos para el formato que debe tener tu manuscrito, se suele entender que las propuestas con mejor presentación tienen una mejor probabilidad de ser aceptadas. Un bosquejo mal presentado podría ser ignorado, ¡incluso si el material es ingenioso!
    • Cíñete a una fuente y un tamaño estándar. Normalmente, Times New Roman de tamaño 12 suele ser el formato establecido para un texto. Muchos escritores profesionales lo prefieren porque es fácil de leer.
    • Enumera las páginas. No se puede pasar esto por alto cuando se envía un manuscrito. En caso de que las páginas estén desordenadas, la persona que reciba tu obra maestra tendrá que saber cuál es la secuencia de las páginas. Asimismo, un encabezado en las páginas (con el autor y el título) no estará de más.
    • Alinea y pon una sangría. El procesador de texto Word alineará las páginas y les colocará una sangría apropiada por defecto, pero en caso hayas jugado un poco con la configuración, es recomendable que te fijes en que todo esté en orden antes de imprimirlo.
  4. Imprime. Al final, imprimir tu obra maestra es un paso simple pero esencial del plan, siempre y cuando hayas estado haciendo alguna de las partes del proyecto en una computadora. Es obligatorio que te asegures de que los cartuchos de tinta sean suficientes, ya que las personas se darán cuenta rápidamente de este problema tan pronto como la fuente comience a atenuarse al final del libro. Si te hace falta equipo para la impresión en casa, las escuelas locales, las bibliotecas y las cafeterías con Internet podrán ayudarte a imprimir económicamente.
    • Si enviarás tu manuscrito a un lugar profesional, podría no estar de más imprimirlo con un tipo de papel ligeramente blanquecino. De esta forma, te destacarás entre el mar de manuscritos genéricos que reciben.
  5. Junta todo con una envoltura. Si haces un libro por tu cuenta, juntarlo podría formar parte del proceso. Hay muchas maneras para lograrlo. Si tienes interés en las artes y las manualidades, el papel kraft y el pegamento serán tus amigos. Encuentra un cartón que pegar a la parte posterior de tus páginas que se utiliza como lomo y pega la pasta laminada sobre el libro.
    • Los manuscritos de las novelas o los trabajos que no son de ficción que quieres que se publiquen no deben tener esto último. Juntar las páginas con un espiral y con una portada básica será suficiente. Lo que sea muy elegante o colorido en la envoltura dañará la seriedad potencial de tu trabajo.

Difundir tu trabajo

  1. Disfruta tu libro. Es sorprendente cuántos escritores tratan de enviar su trabajo sin primero disfrutarlo por su cuenta. A pesar de que es posible que te hayas familiarizado demasiado con los personajes y los desarrollos de la historia por medio del proceso de edición, el verdadero encanto es poder relajarse y asimilarlo por primera vez como lector. Además, te mereces este descanso si has llegado hasta este punto.
  2. Muéstraselo a tus amigos. Los amigos pueden ser unos críticos y editores excelentes ya que se ocuparán de darle a tu trabajo el brillo que se merece y con suerte también se interesarán en ayudarte a lograr tus sueños. Dales una copia de tu manuscrito a algunos amigos y haz que te digan qué opinan. Considera sus ediciones y dale al manuscrito un retoque si crees que vale la pena.
  3. Envía tu manuscrito a las editoriales. Encuentra editoriales a las que te interese enviarlo y comunícate con estas para conversar acerca de tu trabajo. Haz que tu manuscrito les llegue, ya sea por medio de un correo electrónico o un paquete físico. La mayoría de las casas editoriales suelen preferir recibir propuestas como manuscritos bien arreglados. Asimismo, es preferible enviarlos a tantas editoriales como sea posible; incluso aquellas que no te entusiasman tanto te ofrecerán algunas oportunidades para que triunfes.
    • Las editoriales exploran una gran cantidad de propuestas, así que no te dejes deprimir mucho si les toma un tiempo darte una respuesta.
  4. Publica tu novela por tu cuenta. En la era del Internet, es totalmente aceptable (e incluso en algunos casos es preferible) surgir por tu cuenta y publicar tu trabajo en línea. Guardar tu manuscrito final como un formato PDF y soltarlo en Internet es una manera posible de hacer que tu nombre se haga conocido. Algunas páginas web, como Amazon, te ofrecerán unas oportunidades de venta para vender tu libro electrónico terminado. Sin embargo, ten en cuenta que tendrás que promoverlo totalmente por tu cuenta. Si eres afortunado, tu novela ganará popularidad por comunicación de persona a persona, pero tendrás que valerte de ti mismo al principio y ante todo si planeas tener éxito.

Consejos

  • Si eres nuevo en el proceso de redacción, se recomienza que comiences de a pocos; intenta aspirar a más cuando hayas dominado la parte básica.
  • Cualquier momento de redacción o de inspiración creativa requiere de paciencia y constancia. Es recomendable aceptar la frustración como una parte natural del proceso creativo, lo que te permite tener tiempo para relajarte cuando todo se vuelva difícil. Asimismo, no debes pausar el proyecto por mucho tiempo.

Advertencias

  • No te permitas sentirte muy desalentado si escribes un libro y no puedes encontrar una editorial que se interese en él. Algunos de los autores más conocidos escribieron algunas cuantas novelas antes de escribir la que en realidad atrajo la atención de alguien. Ten como regla que, si sigues escribiendo, alguien en algún momento se interesará en ti.
Теги: