Cómo hacer galletas de hombre de jengibre

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Uno de los bocadillos favoritos para las fiestas de navidad son los hombres de jengibre. Son unos bocadillos deliciosos que calientan tu boca y tu estómago y le gustan a todos, incluso a los pequeñitos duendes de Santa. (¡Se rumora que comer hombres de jengibre es lo que mantiene la nariz de Rodolfo brillando cuando lo necesita!). Te mostraremos cómo hacerlas, y añade un brillo rosado a tus mejillas ¡Sigue leyendo!

Pasos

Mezcla los ingredientes secos. En un tazón mediano, mezcla la sal, el bicarbonato de sodio, la harina, el jengibre, la nuez moscada, los clavos y la canela.
Mezcla los ingredientes húmedos. En un tazón grande mezcla la mantequilla, el azúcar, el agua, la melaza y el extracto de vainilla. Puedes usar una batidora eléctrica en caso de que la mantequilla no esté lo suficientemente suave como para mezclar a mano.
Mezcla los ingredientes húmedos con los secos. Añade pequeñas cantidades de la mezcla de harina a la mezcla húmeda con una cuchara de madera hasta que toda la mezcla se vuelva una masa suave. Ten cuidado con el equipo eléctrico ya que puede salpicar harina fuera del tazón al mezclar.
Prepara la masa. Divide la masa a la mitad y usa una envoltura de plástico para cubrir cada mitad. Coloca ambas piezas en el refrigerador por dos horas o hasta que se vuelva firme y dura.
Precalienta el horno. Precalienta el horno a 190 °C (375 °F), o a la marca de gas número 5.
Crea los hombrecitos. Espolvorea ligeramente harina sobre la superficie, ya sea de la mesa o de una tabla de cortar. Usa un rodillo con harina y pásalo por encima de la masa para aplastarla hasta un grosor de 0.30 o 0.25 cm (1/8 o 1/4 de pulgada). Usa tus cortadores de galletas en forma de hombrecitos para cortar la masa, y coloca los hombrecitos en tu bandeja para hornear. Recicla la harina, juntando y aplanando las sobras y cortando más hombrecitos.
Hornea tus galletas unos 9 a 12 minutos, o hasta que estén doraditas. Sácalas del horno y déjalas enfriar en la bandeja por 5 minutos antes de pasarlas a un estante para enfriar. Si las sacas de la bandeja inmediatamente, algunas partes del cuerpo pueden desprenderse. Si lo hacen, cómetelas.
Decóralos. Esta es la parte divertida de hacer galletas (además de comerlas, claro está). Usa diferentes colores de glaseado y confitura para crear la cara y otros rasgos. También puedes “pegar” otros dulces como gomitas con una gotita de glaseado como pegamento.