Cómo hacer salsa verde
La salsa verde es una salsa típica mexicana elaborada con tomatillos verdes frescos, una variedad de tomate que la distingue de la popular salsa roja. La textura crujiente y la acidez de los tomatillos proporcionan a esta salsa su característico sabor agrio y su color verde. Leyendo este artículo aprenderás a hacer salsa verde fresca para 4-6 personas.
Utilizando una licuadora
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Prepara los tomatillos. Quítales la cáscara (muy fina y seca) y enjuaga los tomatillos con agua fría. Pica 8 oz (224 g) de tomatillos y échalos en la licuadora.
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Corta la lima en cuatro trozos. Corta una lima por la mitad del tallo y, con la cara plana hacia abajo, corta cada mitad en otras dos mitades. Obtendrás cuatro cuartos que podrás exprimir sobre los tomatillos que hay en la licuadora.
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Corta en dados la cebolla. Sobre una superficie limpia y plana, adecuada para cortar, trocea la cebolla en dados pequeños hasta obtener 4 cucharadas soperas, y échala en la licuadora.
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Trocea 3 chiles serranos. Quítales los tallos y enjuágalos con agua fría. Trocea los chiles y aparta las semillas. Echa los chiles picados en la licuadora junto con los otros ingredientes.
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Pica el cilantro después de cortarle el tallo. Coge aproximadamente medio manojo de cilantro, enjuagado y secado, y corta los tallos, separándolos de las hojas. Añade las hojas de cilantro a la licuadora junto con los tomatillos, los chiles y la cebolla.
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Pica el ajo. Pica un diente de ajo en trozos muy pequeños utilizando un cuchillo. Añade el ajo a la licuadora, junto con el resto de ingredientes.
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Mezcla los ingredientes en la licuadora y sazona la salsa. Una vez que todos los ingredientes estén en la licuadora, exprime los trozos de lima sobre la mezcla y añade 1/4 de cucharadita de sal. Programa la licuadora para triturar al máximo los ingredientes de la salsa, no para mezclarlos. Añade más sal si es necesario. La salsa verde fresca está lista para servir.
Utilizando el fogón y el horno
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Quítales el tallo, las semillas y pica en trozos muy pequeños los pimientos serranos.
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Quítales las hojas y los tallos y corta los tomatillos por la mitad. Selecciona la función de grill del horno y asa los tomatillos en la bandeja más alta para dorar la piel. Después, puedes pelarlos si quieres.
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Corta la cebolla dulce en trozos muy pequeños. Rehoga la cebolla a fuego medio durante unos 20 minutos (hasta que quede semitransparente) en aceite de oliva, removiendo de vez en cuando.
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Echa los tomatillos, la cebolla, los pimientos serranos, el cilantro picado, el azúcar y la lima (sin piel) en la licuadora. Mezcla todos los ingredientes hasta formar un puré homogéneo.
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Añade sal a tu gusto. Deja que se enfríe en el refrigerador.
Ingredientes
Método uno: Utilizando una licuadora
- 8 oz (224 g) de tomatillos
- 4 cucharadas soperas (55 g) de cebolla troceada
- 3 chiles serranos picados con sus semillas
- 1 diente de ajo, pelado y picado
- 4 cucharadas soperas (55 g) de cilantro picado
- 1 lima mediana
- 1/4 de cucharadita (1 g) de sal
Método dos: Utilizando el fogón y el horno
- 1-2 pimientos serranos
- 1 lb (450 g aproximadamente) de tomatillos
- 1 cebolla dulce pequeña o mediana
- Aceite de oliva
- 1/2-1 taza de cilantro picado
- 1/4 de cucharadita de azúcar
- 1/2 lima (sin piel)
- Sal al gusto
Consejos
- La salsa fresca de tomatillo se debe elaborar justo antes de servir, dentro de lo posible, para conservar la textura y el sabor de los chiles y de los demás ingredientes vegetales.
- La acidez de algunos tomatillos puede ser muy fuerte. Tal vez prefieras hervir los tomatillos durante 2 o 3 minutos y enjuagarlos con agua fría antes de cortarlos y añadirlos a la salsa.
- Para el método 2, puedes variar la receta de las siguientes formas:
- Utilizando más pimientos picantes (u otras variedades), o menos (si prefieres un sabor más suave).
- Prescindiendo del azúcar y de las cebollas dulces. Utiliza pimientos verdes de cayena en lugar de serranos, y añade un poco de caldo vegetal.
Cosas que necesitarás
- Licuadora
- Cuchillo profesional
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