Cómo hacer levadura para hornear

Compra un paquete pequeño de levadura.

Pon la levadura en agua a 30 grados Celsius.

Agrega azúcar y agua a la levadura y mantén la mezcla entre 30 y 38 grados Celsius.

Sigue alimentando la levadura con azúcar y seguirá creciendo.

Asegúrate de alimentar tu levadura cada vez que hornees con ella, y si horneas frecuentemente, por lo menos una vez a la semana. Toma un poco/lo que piensas usar para hornear, y agrega suficiente agua caliente y azúcar para regresarlo a sus proporciones anteriores.

Haz pan usando levadura de la tienda.

Ten una cucharada de masa (aproximadamente una taza).

Aplasta la medida de mesa y colócala en tu bote de harina.

Un día antes de hornear la próxima vez, toma el (ahora seco y duro) pedazo de masa y sácalo del bote.

Coloca el pedazo de masa seco y duro en un tazón caliente de papa y agua con azúcar para que se moje.

Usa el agua espumosa el siguiente día como levadura y repite el proceso para tu día de horneado siguiente.

Haz "pasteles" de levadura con este método.

Hierve medio litro de suero de leche y retírala del fuego.

Mezcla y agrega fécula de maíz hasta que espese y luego deja enfriar.

Moja la levadura en agua tibia.

Mezcla la lavadura con la mezcla de fécula de maíz/suero de leche y deja que se levante toda la noche.

Agrega media taza de harina y fécula extra para hacer la mezcla muy dura.

Aplasta con el rodillo hasta que llegues al grosor de pasteles comprados en la tienda y deja secar.

Úsalos como "pasteles" de levadura comprados.