Cómo convertirte en ciudadano de Nueva Zelanda

Asegúrate de que uno de tus padres sea ciudadano neozelandés. Si quieres obtener la ciudadanía mediante este método, es necesario que uno de tus padres haya sido o sea ciudadano neozelandés. Esto quiere decir que calificas para este tipo de ciudadanía si es que uno de tus padres emigró de Nueva Zelanda y tú naciste en otro lugar.

Revisa si tienes la ciudadanía en caso de que hayas nacido en Nueva Zelanda. En caso de que hayas nacido en este país pero hayas vivido en otro lugar, es posible que de por sí seas un ciudadano por nacimiento. Puedes averiguar más al respecto en la oficina de ciudadanía, por lo que debes ponerte en contacto con ellos y así determinar el estado de tu ciudadanía.

Obtén la ciudadanía mediante la adopción. También es posible obtener la ciudadanía de este modo en caso de que tus padres sean ciudadanos neozelandeses y te hayan adoptado en otro país. Sin embargo, para ello deberás presentar documentos junto con tu solicitud, entre ellos tus documentos de la adopción.

Ten una visa de residencia permanente. Si quieres obtener la ciudadanía, primero debes contar con una visa de residencia permanente. Es necesario que hayas tenido una condición de residente de algún tipo durante 5 años y que, durante este periodo, hayas vivido en Nueva Zelanda.

• Determina si la ciudadanía por concesión es la opción adecuada para ti. En la mayoría de los casos, es necesario que las personas obtengan la ciudadanía por esta vía dado que no tienen padres que sean residentes neozelandeses. De ser el caso, antes de poder calificar para convertirte en ciudadano neozelandés, deberás cumplir primero con determinados requisitos.

Habla inglés con fluidez. No es necesario que tengas la fluidez suficiente como para escribir una novela en inglés, pero sí debes hablarlo lo suficiente como para realizar transacciones cotidianas. Por ejemplo, es necesario que sepas hablarlo lo suficiente como para interactuar con los cajeros, tanto en el supermercado como en el banco.

Ten la intención de continuar viviendo en Nueva Zelanda. No podrás solicitar la ciudadanía de Nueva Zelanda si planeas vivir en otro lugar después de obtenerla. Es necesario que tengas la intención de quedarte y establecer un hogar en Nueva Zelanda.

Demuestra que tienes buen carácter. En este caso, esto se refiere a que no estés involucrado en actividades criminales, lo cual, en su mayoría, implica transgresiones mayores, como el fraude u otro tipo de condenas. Sin embargo, incluso ciertas multas de tránsito podrían desmerecer tu idoneidad.

Ten listos los documentos apropiados. Necesitarás tu partida de nacimiento y tu pasaporte, el cual no es necesario que esté vigente. Asimismo, serán necesarias dos fotografías tuyas tamaño pasaporte, las cuales deben ser idénticas en cuanto al color y debes habértelas hecho recientemente.

• Puedes conseguir la solicitud en línea.

Llena la solicitud. Elige la correcta, ya sea la de ciudadanía por concesión o por descendencia. Nuevamente, será necesario que ingreses la información biográfica sobre ti y sobre tus padres y también que respondas preguntas en cuanto al lugar en donde vivas, tu condición de residente y tu fluidez en el idioma inglés. También habrá una sección relacionada con los delitos penales de los que se te pueda haber acusado.

• Ten en cuenta que la solicitud para la ciudadanía por descendencia no es tan complicada como la de ciudadanía por concesión.

Atestigua la solicitud. Será necesario que un adulto atestigüe tu firma de la solicitud. Un testigo puede ser un funcionario de ciudadanía, pero, en cualquier caso, la persona que actúe como tu testigo también debe contar con un pasaporte neozelandés.

• Esta persona no podrá vivir en el mismo domicilio que tú ni tener un parentesco contigo.

Paga la tarifa. Para poder completar la solicitud, es necesario que pagues la tarifa. A partir del año 2016, la tarifa para completar la solicitud de ciudadanía por concesión asciende a alrededor de 500 dólares neozelandeses, aunque está sujeta a cambios. En el caso de la ciudadanía por descendencia, la tarifa de solicitud es de alrededor de 200 dólares neozelandeses. También es necesario que pagues una tarifa si rechazan tu solicitud.

Envía la solicitud por correo o preséntala en persona. Después de completar la solicitud, es posible ya sea enviarla por correo o bien programar una cita para asistir a una de las oficinas de ciudadanía. Los lugares en donde puedes presentar tu solicitud en persona se encuentran en Wellington, Auckland, Christchurch y Manukau. Puedes encontrar las direcciones en la solicitud en línea.

• En caso de que vayas a enviarla por correo, debes tener cuidado de hacerlo mediante una bolsa de mensajería que pueda rastrearse. Debes enviar tu solicitud a: Department of Internal Affairs, PO Box 10680, Wellington 6143.

Presta un juramento o haz una afirmación. Para poder convertirte en ciudadano por concesión, es necesario que prestes un juramento o bien que hagas una afirmación. Básicamente, tan solo debes ponerte de pie en una ceremonia y decir que juras lealtad a Nueva Zelanda. El juramento es religioso (incluye la frase "por la gracia de Dios"), mientras que la afirmación no lo es. Asimismo, el juramento se realiza sobre un libro religioso.

Obtén una visa de residente. Para ello, será necesario que llenes la solicitud para obtener la visa. Asimismo, ya debes haber sido residente de Nueva Zelanda o haberlo sido anteriormente, por lo que es necesario que hayas estudiado o trabajado en este país con anterioridad teniendo otra visa.

Vive en Nueva Zelanda durante 2 años. Si quieres obtener la residencia permanente, es necesario que hayas vivido en Nueva Zelanda durante 2 años con otra visa de residente. Mediante la visa de residente, se te otorga el derecho de vivir en Nueva Zelanda durante un determinado periodo de tiempo, mientras que, con una visa de residente permanente, obtienes permiso para vivir allí de manera indefinida.

• Para poder cumplir con este criterio como un "compromiso" con Nueva Zelanda, es necesario que realmente hayas estado en el país durante 184 días al año en el transcurso de los últimos 2 años.
• No olvides que es posible que los requisitos en cuanto a la idoneidad difieran según el país del cual provengas. Por tanto, debes tener cuidado de revisar la solicitud para tu país.

Ten una condición de residente fiscal. Para obtener la visa de residente permanente, otra opción es haber tenido una condición de residente fiscal durante por lo menos 41 días al año en el transcurso de los últimos 2 años, lo que significa que es necesario que hayas tenido un empleo y pagado impuestos al gobierno neozelandés.

Establece un negocio en Nueva Zelanda. También puedes calificar para la residencia permanente si estableces un negocio en Nueva Zelanda. Antes de presentar tu solicitud, es necesario que este negocio haya estado en operación durante por lo menos un año.

Mantén una inversión en Nueva Zelanda. Otra opción para obtener una visa de residente permanente es haber invertido 1 000 000 dólares neozelandeses en el país durante por lo menos 2 años. Debes haber tenido esta inversión durante los 24 meses completos sin haberla retirado en ningún momento.

Establece una base en Nueva Zelanda. Una forma de cumplir con la parte del compromiso de la visa de residente permanente es estableciendo una base en Nueva Zelanda. Esto significa básicamente haber comprado una casa en este país y que estés manteniéndola.

Llena la solicitud. Después de cumplir con uno de los requisitos de idoneidad, deberás llenar la solicitud para la visa de residente permanente. Esta abarca elementos como tu información biográfica, información sobre tu idoneidad, una sección de carácter (en donde se discuten los problemas penales que puedas haber tenido en el pasado) y cualquier información sobre otros miembros de tu familia que figuren en tu solicitud y que vayan a vivir contigo, como tu cónyuge o tus hijos.

• Puedes conseguir la solicitud en línea.

Paga la tarifa. Será necesario que pagues una tarifa para completar la solicitud. Este monto dependerá tanto del tipo de visa que vayas a solicitar como de tu país de procedencia, por lo que deberás averiguarlo para así saber cuánto tienes que pagar.