Cómo adelgazar siendo adolescente

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¿Estás cansado de sentirte mal por tu peso? ¿Quizá tus padres y amigos están preocupados por tu papada? Entonces baja de peso, lee el presente artículo y toma en cuenta nuestros consejos. Tal vez te sea más difícil bajar de peso siendo adolescente, porque te tientan las golosinas o la pizza que comparten tus amigos. En todo caso, si estás motivado y decidido, ¡podrás hacerlo! Sigue los siguientes pasos sencillos y lo lograrás en poco tiempo. Pero recuerda: bajar demasiado de peso no es saludable. ¡Sé fuerte, no débil! ¡Hazlo y no te rindas!

Antes de bajar de peso

  1. ¡Trázate un objetivo! Comienza con algo simple, no te traces un objetivo inalcanzable, sino te sentirás mal si no lo logras.
  2. Haz un plan. Busca tiempo libre después de la escuela o de los entrenamientos y llena los espacios vacíos con ejercicios.
  3. Empieza tu dieta mañana apenas te despiertes. Los nuevos inicios suelen ser útiles, ¡siempre que sea solo uno! La noche anterior, prepárate. Planifícate para las siguientes semanas o meses.

Alimentación saludable

  1. Come alimentos saludables ¡y no te saltes las comidas! Come 5 comidas pequeñas al día, cada 3 a 4 horas. Tu nivel de azúcar en sangre deberá ser constante para que no te dé tanta hambre.
  2. Haz ejercicios ligeros antes del desayuno, aunque solo sean estiramientos. Si no hay alimentos en el cuerpo, no habrá nada qué quemar, solo grasa. No te saltes el desayuno. Este activa el cuerpo, el metabolismo y elimina los antojos. Así que aunque solo sea una banana y una taza de té, será muchísimo mejor que nada.
  3. Evita comprar comida en el restaurante o la tienda de la escuela. Lleva tu almuerzo y nada de dinero para comida. De esta manera, resistirás a los antojos. En tu almuerzo, deberás tener sándwiches, 2 frutas y agua. Nada de dulces ni alimentos grasosos.
  4. Come en la mesa, no de pie. Acostúmbrate a tener un lugar específico donde comer (a no ser que comas fuera de casa). Así ya no comerás distraído frente al televisor. Tómate tu tiempo para masticar bien los alimentos, cuenta hasta 20 segundos por bocado. La masticación puede ayudarte a bajar de peso. Te llenarás antes y no tendrás que comer tanto.
    • Recuerda que se necesitan como mínimo 20 minutos para saber que ya no se tiene hambre. No comas en exceso, cuando te sientas satisfecho, detente.
  5. No comas nada desde las 9 de la noche hasta las 6 de la mañana. Esto mantendrá tu cuerpo en su ritmo biológico normal.
  6. Cuando quieras un bocadillo, elige frutas y vegetales en lugar de dulces o chips. Si detestas las verduras, haz algo con menos grasas como unas papas de bajo contenido calórico y grasas. Un yogur bajo en calorías también viene muy bien.
  7. Antes de ir a un restaurante y si tiene página web, échale un vistazo al menú virtual y elige lo que quieres con antelación (a veces incluso, te informarán del valor nutricional de la comida). Esto significa que puedes elegir platos saludables y que no cederás ante los caprichos.
  8. Pregunta si pueden darte porciones más pequeñas de comida. Si bien es un hábito comerse todo, si hay demasiada comida evítalo. Intenta comer un plato más pequeño. Engaña a tu cerebro para que piense que ha comido más de lo que realmente ha comidao.
  9. Bebe al menos 8 vasos de agua al día. No tendrás necesariamente que bebértela toda, solo sorbos durante el día. Haz lo que te resulte cómodo y conveniente, siempre y cuando tomes esa cantidad de agua. Así te sentirás más saciado.
    • Aparte del agua, casi todo lo que bebas contendrá calorías. Aprende a que te guste el sabor del agua y toma más líquidos al día para mejorar tu salud y tu digestión. Los jugos de frutas y de verduras, que carecen de la fibra, son inferiores a simplemente comer las frutas y las verduras, así que trate de evitar los jugos.
  10. Trata de chupar una pastilla de menta en lugar de goma de mascar. La goma de mascar es buena para quemar calorías, pero no para el estómago. Masticar te obliga a tragar más produciendo aire y es posible que no te queden tus jeans ajustados. Si necesitas tener el aliento fresco, prueba chupar una pastilla de menta.

Ejercicios

  1. Camina lo más que puedas (una persona puede quemar unas 6 calorías por minuto a pie). Trata de caminar por lo menos 1,5 km (1 milla) al día para empezar. Cada día, camina un poco más. Camina a un ritmo acelerado y si te quedas sin aliento, reduce la velocidad. Al principio es más importante que por lo menos camines en lugar de que camines rápido.
    • Sube las escaleras en lugar de usar el ascensor.
    • Caminar 15 minutos al día aumenta la esperanza de vida en 3 años, según ciertos estudios.
    • Baila la música del televisor o de tu reproductor Mp3. Cualquier movimiento te hará bajar de peso, así que diviértete y baila para adelgazar.
  2. Ejercítate. No importa si levantas pesas, caminas por tu vecindario, nadas o corres en una pista, siempre bajarás de peso, siempre y cuando hagas ejercicio durante 3 a 4 días a la semana y quemes más calorías de las que consumes. Si no tienes una cinta caminadora, busca una piscina, camina en agua hasta la cintura y corre en el mismo lugar, hacerlo quema tantas calorías como correr en una cinta caminadora.

Otras medidas

  1. Pésate todas las semanas un día determinado por la mañana, antes de comer y después de ir al baño. Eso te mostrará que has bajado de peso en algún momento del día. Si todavía estás en la etapa del crecimiento, tu peso no deberá cambiar en absoluto. Pensarás que has engordado de grasa, pero realmente solo habrás crecido un poco. Más bien, mídete la cintura para que veas si has perdido grasa.
    • Pesarse todos los días puede causar lo que algunos denominan “obsesión por la balanza” o una fijación malsana de los resultados diarios. La retención de agua en el cuerpo puede ser de hasta 2 kilos (5 libras) por día, por eso la balanza también puede ser engañosa.
    • Recuerda que la pérdida de peso es un proceso continuo. Sin embargo, tu trabajo duro y determinación darán sus frutos, siempre y cuando mantengas tu ánimo en alto y una perspectiva optimista. Muy pocas personas están completamente satisfechas con sus cuerpos, pero trata de amar el tuyo lo más que puedas. Sin duda te corresponderá.
  2. Registra tu progreso. De esta manera podrás anotar cualquier cambio. Registra todo lo que comas, los ejercicios que haces y cuántos centímetros de cintura pierdes. Suma la ingesta total de calorías de cada día (procura que sean 2000 al día) y cuántas calorías quemas (cualquier máquina de ejercicios que uses te dará una cifra aproximada). De esta forma podrás ver los efectos, cambiar cosas y ver qué plan se adapta mejor a ti.
    • Además, si registras las calorías que has comido, podrás ingresarlas a ciertos sitios web que luego calcularán si debes haber comido más calorías o menos ese día y podrás planificarte con esa información.
    • Descárgate una aplicación. Hay muchas aplicaciones excelentes y gratuitas que te pueden ayudar a llevar un registro de tu progreso, por ejemplo, MyFitnessPal y MapMyFitness. Échale un vistazo a tu tienda de aplicaciones para que veas qué pueden ofrecerte.
  3. Ten confianza en ti mismo. Si estás seguro de que bajarás de peso, entonces lo más seguro es que tengas un progreso óptimo. ¡Verás que en realidad funciona!
  4. ¡No seas demasiado duro contigo mismo! Si pasas un día en pijama viendo alguna película, no te preocupes. Si un día comes comida chatarra, ¡no te preocupes! Siéntete un poco culpable y al día siguiente vuelve a la senda iniciada para seguir adelgazando.

Consejos

  • Escucha música mientras haces ejercicio. Trata de hacer un ejercicio diferente con cada canción (ejercicio rítmico).
  • Acuéstate en la cama con una almohada y levanta las piernas hasta el vientre unas 25 veces al día.
  • Mientras hagas ejercicio, piensa en sus beneficios y las metas que intentas alcanzar.
  • En lugar de sentarte, quédate de pie. En esta posición también se queman calorías.
  • Trata de cepillarse los dientes después de cada comida y bocadillo. Todo parecerá menos fascinante con pasta dental en la boca.
  • Los jóvenes necesitan dormir entre 8 y 10 horas por la noche. Se ha demostrado que algunas veces solo duermen 6 horas.
  • Si te da hambre entre horas, come algo saludable. Mantendrá tu nivel de azúcar en sangre y no comerás de más en la siguiente comida.
  • Trata de hacer sentadillas, abdominales o levantar las piernas.
  • Hacer yoga estira los músculos, dándote músculos largos y delgados.
  • Trota si no te es cómodo correr.

Advertencias

  • Si sigues correctamente una dieta, se supone que bajarás de ½ a 1 kilo (1 a 2 libras) a la semana, o sea ¡de 2 a 4 kilos (5 a 10 libras) al mes! Si bajas más de 1, 5 kilos (3 libras) a la semana, podrías estar adelgazando demasiado rápido, cosa que no es saludable. Sin embargo, dependiendo de tu peso y de la cantidad perdida, quizá no sea malo. Ten siempre presente que si adelgazas demasiado rápido, experimentarás una pérdida de cabello. Habla con tu médico si estás preocupado al respecto.
  • Lee y revisa las etiquetas de información nutricional. El hecho de que diga que algo es bajo en grasa en la parte frontal no quiere decir que sea saludable.
  • Trata de no obsesionarte con determinado número. El espejo y tus propios sentimientos son el mejor indicador de tu éxito.
  • Estar obsesionado con la pérdida de peso puede ocasionar trastornos alimenticios.
  • Ciertos estudios han demostrado que si te pesas mucho realmente ganarás más peso, por eso mejor básate en algo más, por ejemplo, cómo te sientes con tus jeans favoritos puestos o lo que nota tu familia.
  • ¡No te prives de alimento! Si lo haces, pondrás tu metabolismo en modo de inanición, con lo cual se ralentizará y disminuirá la pérdida de peso. Sin embargo, si decides optar por esta opción (un periodo de tiempo controlado en el que solo bebas agua o jugos para limpiar tu organismo), un poco de ejercicio diario impedirá que tu metabolismo se ralentice, lo que causaría un rápido aumento de peso cuando comiences a comer alimentos sólidos.
  • Si no adelgazas después de un par de semanas, quizá debas ver a un nutricionista.
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