Cómo mejorar la complexión de tu piel

Опубликовал Admin
Para tener una piel bonita, se necesita más que solo usar los productos adecuados. También debes cuidar bien de tu piel y llevar un estilo de vida saludable. En caso de que tengas problemas en la piel que no puedas manejar con remedios caseros y cambios en tu estilo de vida, quizás quieras buscar tratamientos profesionales.

Cuidar de tu piel

  1. Lávate el rostro como mínimo una o dos veces al día. Lavarte el rostro ayudará a deshacerte de todo el polvo, la suciedad, la mota y el aceite que van a parar a tu piel durante el día. Sin embargo, si te lavas el rostro con demasiada frecuencia, esto despoja a tu piel de la humedad y los aceites naturales, lo cual hará que tu piel produzca aún más aceite para compensarlo. Esto, a su vez, ocasionará aún más brotes y acné.
    • En caso de que tu piel se torne aceitosa durante el día, haz el intento de limpiarte las partes aceitosas con papel secante. Puedes conseguirlo en la mayoría de las tiendas de belleza.
    • No te laves el rostro usando agua caliente, ya que esta puede resecar mucho. Usa en cambio agua tibia y enjuágate con agua fría al terminar.
    • Siempre debes lavarte el rostro y quitarte el maquillaje antes de irte a dormir. En caso de que te dejes puesto el maquillaje, podrías obstruirte los poros y terminar con un brote.
  2. Utiliza un limpiador facial suave diseñado para tu tipo de piel. Puedes encontrar distintos tipos de limpiadores a tu disposición, algunos de los cuales están diseñados para ayudar con determinados problemas (por ejemplo, el acné, la oleosidad o la sequedad). Al elegir un limpiador, no optes por nada excesivamente perfumado ni coloreado, ya que es posible que te irrite la piel. Haz el intento de buscar un limpiador que también sea exfoliante. Los exfoliantes ayudarán a eliminar las células de piel muerta y revelar la piel brillante debajo.
    • En caso de que tengas la piel seca, busca algo que diga "hidratante" o "humectante".
    • Si es que tu piel es aceitosa, busca algo libre de aceite o que esté etiquetado como "para piel aceitosa".
    • En caso de que tengas acné o puntos negros, haz el intento de usar algo que diga "limpieza profunda" o "purificador". Estos productos eliminarán la suciedad dentro de tus poros.
  3. Trata de no tocarte el rostro con demasiada frecuencia. Esto es de particular importancia para quienes estén luchando con el acné. Mientras más te toques el rostro, más suciedad y bacterias se introducirán en tu piel. Esto ocasionará más acné y brotes.
  4. Combate las ansias de reventarte las espinillas que aparezcan. Esto podría ocasionar un mayor enrojecimiento o, peor, cicatrices. Prueba con usar en cambio un tratamiento para espinillas a base de azufre.
    • En caso de que sea necesario reventarte las espinillas, debes suavizarte primero la piel con vapor o un paño empapado con agua caliente. Utiliza un extractor esterilizado de espinillas en lugar de usar los dedos. Al terminar, limpia la zona con suavidad usando alcohol isopropílico.
  5. Utiliza un tonificador y humectante faciales. Los tonificadores ayudan a volver a equilibrar el pH de tu piel y reforzar los poros. Los humectantes ayudan a hidratarte la piel. Son excelentes para las pieles de todo tipo, incluso la piel aceitosa.
    • En caso de que tu piel sea aceitosa, haz el intento de usar un humectante liviano y libre de aceite.
  6. Elige la base adecuada. Existen algunas bases que pueden hacer que tu piel no solo tenga un peor aspecto sino también se sienta peor después de quitarte la base. En ocasiones, la forma como te apliques el maquillaje también marcará una diferencia. Ten cuidado de usar una base adecuada para tu tipo de piel. Asimismo, trata de usar una prebase antes de aplicarte la base. Las prebases ayudan a llenar los poros e imperfecciones y le dan a tu piel una apariencia más uniforme.
    • En caso de que tu piel sea aceitosa, debes usar maquillaje libre de aceite y a base de minerales. Evita las bases de crema y, en cambio, opta por las de polvo o líquidas. Ten cuidado de que diga "no comedogénica" en la etiqueta de la base (que quiere decir que no te obstruirá los poros).
    • En caso de que tu piel sea seca, omite la base en polvo, ya que esta puede darle un aspecto descascarado a tu piel. Usa en cambio bases líquidas o de crema. Haz el intento de buscar algo que también sea humectante.
  7. Mantén limpias las brochas de maquillaje. Las brochas sucias de maquillaje pueden propagar bacterias sobre tu rostro, lo cual puede ocasionar acné, brotes y espinillas. Limpia las brochas unas cuantas veces por semana con jabón y agua o un limpiador para brochas de maquillaje.
  8. Disfruta del sol, pero ten cuidado de protegerte también de él. Si bien la luz solar es buena debido a que te proporciona vitamina D, demasiada luz solar puede hacerle mucho daño a tu piel. Apunta a alrededor de entre 20 y 25 minutos de luz solar al día. Demasiada luz solar puede ocasionar cáncer de piel y arrugas. Estos son algunos consejos sobre la forma de mantenerte a salvo de los rayos dañinos del sol:
    • Usa protector solar con un factor de protección de por lo menos 15.
    • Haz el intento de evitar el sol entre las 10 a. m. y las 2 p. m., ya que es más fuerte en este intervalo.
    • En caso de que vayas a pasar mucho tiempo afuera al sol, ten cuidado de cubrirte con mangas largas y sombreros.

Cuidar de tu cuerpo

  1. Bebe entre 6 y 8 vasos de agua al día. Esto lava las impurezas y deja tu piel con un brillo saludable. Asimismo, el agua ayuda a rehidratarte la piel y darle un aspecto más firme y juvenil. En caso de que tu piel se vea opaca y grisácea, debes beber más agua.
    • El té verde también es muy bueno para la piel, ya que es rico en antioxidantes y tiene propiedades antiinflamatorias. Puede ayudar a que tu piel tenga un aspecto más despejado. Prueba con beber té verde helado sin añadirle azúcar, ya que es posible que el té verde caliente incremente el enrojecimiento de la piel.
  2. Asegúrate de dormir entre 7 y 8 horas. Dormir es importante para la piel y también para tu salud en general, ya que le da tiempo a la piel para sanar y reponerse.
    • Haz el intento de dormir boca arriba y no sobre un lado o boca abajo. Esto ayuda a evitar las arrugas, la hinchazón y las bolsas debajo de los ojos.
    • Mantén la cabeza ligeramente elevada mientras duermas de forma que el líquido no se acumule en tu rostro.
  3. Come bien para tener la piel saludable. Existen determinados alimentos que, además de ser buenos para el cuerpo, también lo son para la piel. Contienen vitaminas y antioxidantes que ayudan a que tu piel tenga un aspecto saludable. Estas son algunas cosas que podrías añadir a tu dieta para mejorar la salud de tu piel:
    • Las grasas saludables se encuentran en el aguacate, el pescado, las nueces y las semillas. En su mayoría, estos alimentos también contienen vitamina E. Ayudan a hidratarte la piel y mantenerla juvenil.
    • El selenio es un antioxidante que se encuentra en el brócoli, los huevos, el pescado, las nueces, los mariscos y los tomates. Te protege la piel del cáncer, los daños por el sol y las manchas en la piel.
    • La vitamina C es un antioxidante que puede iluminarte la piel y darle un brillo saludable. Asimismo, puede reducir las imperfecciones. Puedes encontrarla en las grosellas negras, los arándanos azules, el brócoli, la guayaba, el kiwi, las naranjas, la papaya, las fresas y las batatas.
    • La vitamina E se encuentra en el aguacate, las nueces, las semillas y los aceites vegetales. Ayuda a ralentizar el envejecimiento y hace que tu piel sea más saludable.
    • El zinc ayuda a reparar los daños y hace que la piel permanezca sintiéndose suave. Puedes encontrarlo en el pescado, la carne roja magra, las aves de corral, las nueces, las semillas, los mariscos y los productos integrales.
  4. Evita los alimentos que podrían dañarte la piel. Existen algunos alimentos que le hacen más mal que bien a tu piel. Haz el intento de consumir una menor cantidad de productos lácteos, carbohidratos, harina blanca y azúcar, ya que podrían ocasionar acné, piel caída y envejecimiento prematuro.
  5. Haz ejercicio como mínimo por 30 minutos al día. Hacer ejercicio ayuda a incrementar el flujo de sangre hacia tu piel y mantenerla saludable. Asimismo, podría reducir el estrés. Demasiado estrés puede hacer que tu piel produzca demasiado aceite, y esto puede ocasionar acné.
    • Ve al gimnasio o inscríbete en alguna clase de baile o de yoga. En caso de que no tengas tiempo o dinero, siempre puedes ir a caminar o trotar alrededor de la manzana.
  6. Trata de reducir el estrés. El estrés puede ocasionar brotes y acné. De serte posible, haz el intento de separar un poco de tiempo durante el día o la semana para relajarte, descomprimirte y desestresarte. Estas son algunas ideas en cuanto a lo que puedes hacer:
    • Sal a caminar o haz ejercicio. Esto ayudará a que tu mente se concentre en el movimiento y no en lo que te estrese.
    • Medita. Busca un lugar tranquilo y enfócate en tu respiración. Toma consciencia de tus alrededores, pero sin enfocarte en ellos.
    • Escucha un poco de música relajante o inspiradora. En caso de que tengas talento para la música, también puedes tratar de cantar o tocar música.
    • Haz algunas manualidades (por ejemplo, dibujar, pintar o tejer).
  7. Intenta dejar de fumar. Los estudios han demostrado que fumar puede ocasionar envejecimiento prematuro y arrugas.
  8. Reduce el alcohol. Demasiado alcohol puede ser duro con tu piel. El alcohol te deshidrata, y esto contribuye a la piel seca, las líneas finas y las arrugas. Asimismo, puede hacer que tu cuerpo no absorba la vitamina A suficiente, y esto es fundamental para la regeneración de la piel. El alcohol dilata los vasos sanguíneos en el rostro, lo cual ocasiona enrojecimiento, hinchazón y arañas vasculares permanentes.
    • En caso de que bebas alcohol, ten cuidado de beber bastante agua mientras consumas alcohol y también después.

Usar mascarillas faciales y otros remedios naturales

  1. Utiliza mantequilla de karité como humectante. La mantequilla de karité es completamente natural y no contiene químicos sintéticos dañinos. Asimismo, suaviza el enrojecimiento y la inflamación y puede ser muy reconfortante. Tan solo aplícate una capa delgada de mantequilla de karité en el rostro como lo harías con cualquier otro humectante. Ten cuidado de evitar las zonas sensibles alrededor de los ojos y la boca.
    • Evita usar mantequilla de karité en el rostro si tu piel es aceitosa, ya que podría contribuir a los brotes o hacer que tu piel se torne grasosa.
  2. Elabora una mascarilla facial de plátano para tratar la piel aceitosa. Necesitarás un plátano maduro, 1 cucharadita de miel y 2 cucharaditas de jugo de limón. Mezcla todo en un tazón pequeño y espárcelo sobre tu rostro. Deja reposar la mascarilla por 15 minutos y luego enjuágala con agua fría.
  3. Ilumina la piel seca y opaca usando una mascarilla de yogur griego. Mezcla 2 o 3 cucharadas de yogur griego con 1 o 2 cucharaditas de miel. Aplícate la mezcla en el rostro, asegurándote de evitar la zona alrededor de los ojos, y déjatela por 20 minutos. Luego, enjuágala con agua tibia.
    • Es posible añadir unas cuantas gotas de jugo de limón para iluminarte un poco más el rostro, aunque será necesario que evites el sol por algunas horas después.
    • Asimismo, puedes añadir un poco de arándanos azules, ya que están llenos de antioxidantes, lo que hace que sean excelentes para el tratamiento del acné. Necesitarás mezclar la mascarilla facial en una licuadora para que todo quede uniforme.
    • También puedes usar yogur simple sin miel, limón ni arándanos azules.
  4. Prueba con el método de limpieza con aceite. Empieza con el rostro seco. No es necesario que tu piel esté limpia. Mezcla algunos de los aceites de la lista a continuación y masajéate una gota del tamaño de una moneda en el rostro, evitando los ojos y la boca. Sigue masajeándote con un movimiento uniforme y circular por 1 o 2 minutos. Humedece un paño en agua caliente y presiónalo contra tu rostro. De ser necesario, repite el procedimiento con el otro lado del paño. Con las esquinas, limpia el exceso de aceite de las partes difíciles de alcanzar de tu rostro (por ejemplo, la nariz). Es posible que observes un poco de residuo aceitoso. Esto es normal y, de hecho, es útil. Ten en cuenta que podría tomar unos días para que tu piel se acostumbre a esto. Quizás se ponga peor antes de mejorar. Estas son algunas combinaciones para empezar:
    • En caso de que tengas la piel aceitosa, utiliza una parte de aceite de ricino o de avellana y 2 partes de aceite de girasol, de semillas de uva o de almendra dulce. Los aceites de avellana y de girasol constituyen una excelente combinación para el acné.
    • En caso de que tengas la piel mixta, utiliza 1 parte de aceite de ricino o de avellana y 3 partes de aceite de girasol o de cualquier otro tipo.
    • En caso de que tengas la piel seca, opta por el aceite de aguacate, de albaricoque, de jojoba o de semillas de uva puros. Utiliza muy poco o nada de aceite de ricino. Ten en cuenta que el aceite de jojoba podría obstruirte los poros.
    • No uses aceite de coco ni aceite de oliva, ya que ambos suelen obstruir los poros, lo cual ocasiona brotes.
  5. Elabora un exfoliante facial para iluminarte y aclararte la piel. No salgas a comprar un exfoliante facial sino, en cambio, puedes tratar de hacer uno tú misma en casa. Quizás incluso tengas la mayor parte de los ingredientes en la alacena. Tan solo mezcla aceite y sal o azúcar en un tazón pequeño. Pica la fruta o el vegetal que hayas elegido y añádelo. Debes usar apenas suficientes frutas o vegetales como para espesar el exfoliante, pero no tanto que se torne grumoso. Masajéate el exfoliante sobre el rostro húmedo durante unos minutos y luego enjuágatelo con agua tibia. Guarda las sobras, de haberlas, en el refrigerador por hasta 2 semanas. Estas son algunas recetas para empezar:
    • Si quieres elaborar una mascarilla humectante, necesitarás 2 partes de sal, 1 parte de aceite de oliva y pulpa de tomate.
    • Si quieres hacer una mascarilla aclaradora, necesitarás 2 partes de azúcar, 1 parte de aceite de cártamo y un kiwi pelado.
    • Si quieres iluminarte la piel, necesitarás 2 partes de azúcar, 1 parte de aceite de almendras y fresas.
    • En caso de que tu piel sea sensible, haz el intento de elaborar una mascarilla reconfortante. Necesitarás 2 partes de azúcar rubia, 1 parte de aceite de aguacate y un pepino pelado.

Usar tratamientos profesionales

  1. Trata las arrugas profundas usando rellenos. Los rellenos son sustancias que se pueden inyectar en la piel para rellenar las arrugas y estimular la producción del colágeno que engorda la piel. Los tratamientos con rellenos pueden durar desde 6 meses hasta un par de años. Entre los rellenos comunes se encuentran los siguientes:
    • Radiesse, un relleno hecho con cuentas diminutas de calcio (dura alrededor de 18 meses)
    • Sculptra, un ácido láctico sintético (dura alrededor de 2 años)
    • ácido hialurónico, un relleno con efectos más de corto plazo que dura alrededor de 6 meses
  2. Mejora las arrugas con el rejuvenecimiento láser. Los tratamientos con láser pueden mejorar de manera significativa la apariencia de las arrugas, y sus efectos pueden durar varios años. El rejuvenecimiento láser se encuentra en dos formas distintas: no ablativo (que es relativamente suave y superficial) y ablativo (que elimina las capas superiores de la piel).
    • El rejuvenecimiento láser es muy eficaz para tratar las arrugas profundas, pero los tratamientos son dolorosos y podrían requerir un tiempo de recuperación de varios días.
  3. Utiliza medicamentos tópicos para eliminar el enrojecimiento y la inflamación. El enrojecimiento en el rostro puede tener muchas causas distintas, desde los daños por el sol o las alergias hasta la infección. Quizás puedas tratarlo con un ungüento antibiótico (por ejemplo, MetroGel o Sulfacet) o un medicamento que reduzca las reacciones inmunes (por ejemplo, Elidel), aunque esto dependerá de la causa subyacente del enrojecimiento.
    • Consulta con un dermatólogo para determinar la causa del enrojecimiento e idear un plan de tratamiento.
  4. Utiliza el láser de KTP o los tratamientos con luz pulsada intensa para la decoloración y el enrojecimiento. La terapia con láser de KTP y la luz pulsada intensa (IPL, por sus siglas en inglés) son eficaces en cuanto a la reducción del enrojecimiento ocasionado por grupos de vasos sanguíneos cerca de la superficie de la piel. Asimismo, pueden usarse para el tratamiento de la decoloración ocasionada por los daños por el sol, los cambios hormonales o las lesiones en la piel.
    • Quizás sea necesario que te realices varios tratamientos con láser de KTP o con terapia de IPL en el transcurso de varias semanas para obtener los resultados deseados.
  5. Hazte un pelado químico para mejorar el aspecto general de tu piel. El pelado químico puede mejorar una amplia gama de problemas cutáneos, entre ellos las arrugas, las líneas finas, la decoloración, los daños por el sol y las cicatrices leves. En caso de que quieras obtener un color de piel más fresco y uniforme, considera la posibilidad de realizarte un pelado químico.
    • Ten cuidado de protegerte el rostro del sol después de un pelado químico debido a que incrementará temporalmente la sensibilidad de tu piel al sol.
    • Es posible que algunas personas experimenten cicatrización o decoloración de la piel después de un pelado químico.
  6. Trata el acné con medicamentos con receta. En caso de que tengas un acné testarudo que no responda a los tratamientos sin receta o los cambios en el estilo de vida, conversa con tu dermatólogo. Quizás pueda recetarte un medicamento que te funcione. Estos son algunos tratamientos médicos comunes para el acné:
    • tratamientos con retinoides tópicos
    • ungüentos antibióticos, a menudo usados en conjunto con los retinoides
    • antibióticos orales
    • tratamientos a base de hormonas, como los anticonceptivos orales (la píldora) o los agentes antiandrógenos
    • la isotretinoína, un medicamento muy eficaz pero que, debido al riesgo de efectos secundarios serios, se usa únicamente para tratar los casos de acné muy graves y difíciles de tratar

Consejos

  • Considera la posibilidad de acudir a un dermatólogo. Él podrá recetarte medicamentos que puedan ayudarte con tu piel.
  • Los ingredientes en la pasta dental saborizada (por ejemplo, canela y fresa) pueden ocasionar irritaciones en la piel. En caso de que tengas acné alrededor de la boca y utilices pasta dental saborizada, haz el intento de cambiar a una simple.
  • El aire dentro de tu casa puede tener un efecto sobre tu piel. En caso de que tu piel sea seca y descascarada, haz el intento de conseguir un humidificador. En caso de que tengas acné y tu casa tenga mucho polvo, trata de conseguir un purificador de aire.
  • Revisa tus productos para el cabello en caso de que tengas acné o irritación cerca del nacimiento del cabello. Los productos que ocasionan estas cosas suelen contener aceite mineral, cera de abeja o cera microcristalina. Los productos a base de agua son los que suelen ser menos irritantes.
  • Existen algunos medicamentos (por ejemplo, los antihistamínicos, los diuréticos y antidepresivos) que pueden ocasionar piel seca o acné. En caso de que esto te ocurra, conversa con tu farmacéutico o doctor y fíjate si es posible tomar un medicamento alternativo en su lugar o tomar una dosis más baja.
  • Mantén tu cabello limpio y haz el intento de mantenerlo fuera de tu rostro lo más posible. El cabello aceitoso que entra en contacto con la piel puede ocasionar brotes.

Advertencias

  • En caso de que tengas una reacción alérgica a un producto, mascarilla o exfoliante, debes dejar de usarlo de inmediato y conversar con tu doctor.
  • Todos tienen la piel diferente. Es posible que lo que le funcione a tu amigo no te funcione a ti.
  • Existen algunos limpiadores faciales que deben usarse varias veces antes de empezar a ver algún efecto. En caso de que al principio no ocurra nada, evita desechar el producto. Inténtalo unas cuantas veces más.
  • Es posible que el tipo de agua que tengas en casa afecte tu limpiador facial. Por ejemplo, el agua blanda no enjuaga muy bien, en tanto que el agua dura evita que el jabón haga espuma. Si esto te ocurre, haz el intento de usar una menor cantidad de limpiador u optar por uno que no haga tanta espuma.
Теги: